E es por Ernesto que una vez comiendo seso de vaca se dio cuenta que lo quedaba en el fondo del plato no era juguito, que el jugo lo tienen los tomates o las mandarinas, situacion bizarra se dijo. ¿Pero si lo que sale de la carne es sangre. por que mama le dice jugo? ¿no son jugosos los churrascos? ¿no son jugosas las hamburguesas? ay mama y sus mentiras, despues me dice que yo no mienta, seguro lo hace para que me coma este seso de vaca ¡un momento, pero si yo tambien tengo sangre! cuando sale es por me duele. Pobre vaca le debe haber dolido que le sacaran el seso, mi mama dice que el seso de vaca alimenta, el qe no debe de alimentarse es el hijo de la vaca ...y yo que creia que la carne venia del supermercado....que cosa.... me parece que los que tenemos jugo en vez de sangre somos nosotros...
estaba en todas estas meditaciones Ernesto cuando cayo de muerte e indignacion sobre las proteinas del almuerzo.
Cuento extraido de la página "Los niños no van al matadero".
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